28 noviembre 2014

Aspectos básicos de nuestra cuestión energética (primera parte)



ASPECTOS BÁSICOS DE NUESTRA CUESTIÓN ENERGÉTICA (primera parte)
Cuestiones conceptuales – Algunos datos y opiniones
Definiciones
En física se define a la energía como la capacidad para efectuar un trabajo, que a su vez es el desplazamiento de un cuerpo por la aplicación de una fuerza (matemáticamente, el trabajo es la integral de la función fuerza). El trabajo y la energía se miden con las mismas unidades (energía en todas sus formas, incluso el calor). Son etapas de un mismo fenómeno. La energía es la capacidad de mover un cuerpo, el trabajo es ese movimiento ya efectuado.

El joule o julio es la unidad del Sistema Internacional que mide trabajo y energía. La potencia es la cantidad de trabajo realizado por unidad de tiempo (es una medida de intensidad). Su unidad en el Sistema Internacional es el watt o vatio.

La generación primaria es el aprovechamiento de energías preexistentes en la naturaleza. Incluye la energía fósil (de petróleo, gas, carbón y metano hidratado), la energía nuclear, la hidráulica, la eólica, la solar, la mareomotriz, la geotérmica y la de biomasa (termodinámicamente hablando, toda energía primaria constituye un ingreso al sistema de aprovechamiento).

La generación secundaria es el uso de fuentes primarias para generar otras, sobre todo electricidad (y calor, aunque en menor medida). En la segunda mitad de este siglo el hidrógeno será probablemente una generación secundaria importante.

La energía es considerada renovable o de fuente renovable, cuando proviene de un recurso inagotable en la práctica y/o que se regenera sin la intervención humana. Es el caso de las energías eólica, solar, hidráulica, de biomasa y mareomotriz (esta última agrupa a 2 tipos de energía diferentes, la proveniente de las olas y la proveniente de las mareas). La energía es no renovable cuando el uso extingue a la fuente. Es el caso de los combustibles fósiles y la energía nuclear de uso actual (por fisión, es decir por separación). Un caso intermedio es la energía geotérmica, aunque se la considera renovable cuando se hacen comparaciones entre un grupo y otro (es renovable para el horizonte temporal de cualquier análisis, al igual que lo es la radiación del sol, si bien el sol morirá en algún momento muy lejano).


Demanda mundial de energía – Proyecciones – Algo sobre nuestra situación
En 2010, 87 % del consumo mundial de energía primaria provino de los combustibles fósiles, 35 % del total proveniente del petróleo, 30 % del carbón y 22 % del gas (nada aún del metano hidratado ubicado en las profundidades de los océanos, el combustible fósil más abundante de todos). La energía nuclear fue 6 % del total, la de biomasa 3,7 %, la hidráulica 2,5 % y las restantes 4 renovables sumadas el 0,8 % (eólica, solar, mareomotriz y geotérmica).

Existen diferentes unidades para expresar este consumo. Una unidad es millones de barriles diarios de petróleo equivalente, cuya sigla en inglés es mboe/d (para cada fuente primaria se calcula su equivalencia con el petróleo, y se expresa en millones de barriles diarios). Es la unidad usada en los informes de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo). Una segunda, similar a la anterior, es millones de toneladas de petróleo equivalente por año (mtoe/y), usada por la AIE (Agencia Internacional de la Energía).

Una tercera es un múltiplo del joule, el Exajoule (1018, mil millones de veces un Giga, que a su vez es mil millones de veces la unidad) y se expresa en Exajoules por año (EJ/y en inglés). Es la unidad más usada por varias organizaciones ambientalistas. Una cuarta es cuatrillones de Btu por año (cuatrillones de la escala corta, 1015, expresados en esa cantidad anualmente calculada y abreviados quadrillion Btu/y, como se escribe en inglés). Es la unidad usada en los International Energy Outlooks del gobierno de EE.UU.

La potencia eléctrica se mide en watts (vatios) o sus múltiplos MW o GW (megavatios y gigavatios respectivamente, en español). Así se mide correctamente la capacidad instalada para generar electricidad. La energía eléctrica producida o consumida se mide en kWh o sus múltiplos. Un kWh es la cantidad de energía generada o consumida a una potencia promedio de un kW, durante un lapso de una hora.

Estas 2 variables clave, potencia y cantidad de energía, se expresan así porque la energía eléctrica no puede almacenarse. Todas las baterías del mundo pueden almacenar sólo 10 minutos de la capacidad instantánea mundial para generar electricidad.

El consumo actual de energía primaria a nivel mundial, tomando valores redondeados, es 225 mboe/d, aproximadamente equivalentes a 11.000 mtoe/y, a 250 EJ/y, y también a 500 quadrillion Btu/y. Cuando se trata de electricidad, suelen usarse como unidades a mtoe o a kWh, kilowatts hora (o sus múltiplos GWh y cuatrillones de kWh, entre otros). El consumo mundial actual de electricidad es de 20 cuatrillones de kWh por año (cuatrillones de la escala corta, 1015).

Los 800 mil barriles diarios de bioetanol estadounidense son el 0,35 % de la generación primaria mundial. El parque eólico Arauco, en La Rioja, tiene una potencia instalada de 25 MW, el 0,09 % de la capacidad total instalada en La Argentina (es decir, de la generación secundaria de energía, de la generación primaria el número es más pequeño aún).

El mundo hoy consume casi el doble de energía primaria y casi el cuádruple de electricidad que hace 40 años. En los países desarrollados, la electricidad cuesta mucho menos que en el pasado. Por ejemplo, en EE.UU. el consumo residencial paga en promedio US$ 0,17 / kWh, un 93 % menos que a comienzos del siglo XX, cuando se pagaba US$ 2,50 (medido a moneda constante).

Un país desarrollado consume unos 8.000 kWh/habitante/año. Países pobres consumen 500, y países con desarrollo intermedio como es nuestro caso, consumimos 2.500 kWh/hab/año.

El consumo mundial de electricidad seguirá creciendo y va a duplicarse, llegando a 40 cuatrillones de kWh anuales, antes del año 2040.

Continuará

Ing. Agr. Luis Villa
@LuisVilla2805

06 noviembre 2014

Qué atributos debe tener un (buen) dirigente agropecuario



QUÉ ATRIBUTOS DEBE TENER UN (BUEN) DIRIGENTE AGROPECUARIO
El principal problema del país es la falta de liderazgo en todos sus ámbitos. Este déficit, importante en cualquier momento de la historia, es catastrófico en el momento actual donde lo constante es la complejidad, el cambio y la innovación permanentes.

Un líder no nace, se hace. Se prepara durante mucho tiempo. Básicamente es alguien que piensa poco en sí mismo y mucho en los demás. Es alguien que tiene solidez técnica, cultura, conductas apropiadas permanentes y grandes cualidades en la comunicación.

Un país con perfil agroalimentario como el nuestro contará con posibilidades ciertas de desarrollo sólo si logra ubicar 30 ó 40 líderes en puestos clave de la sociedad, a lo largo de las cadenas de valor, en diferentes estamentos de gobierno, etc. La condición es doble, contar con esas personas, y lograr que sean los decisores principales.

Todo joven del sector, entendiendo por joven a aquel menor de 40-45 años, que tenga deseos de convertirse en un referente honesto en todo sentido, debe asumir que tiene por delante un desafío duro pero apasionante a la vez. Los esfuerzos formativos colectivos son más eficaces, más gratos. Cuanto más variado sea el grupo al que pertenezca, mucho mejor (la diversidad en cuanto a género, edad, extracción y pensamiento político constituye una fortaleza, nunca una debilidad).

Se requieren cultura general y conocimientos básicos de filosofía y ciencia política, y de lógica, matemática, estadística, biología, física, química y climatología. Las habilidades comunicacionales son imprescindibles (saber hablar y escribir de manera correcta en cada situación, tener oratoria y escuchatoria, tener mucha pero mucha memoria). Todo se ejercita, no hay métodos mágicos.

Luego están los conocimientos de historia y geografía. Cuando se conoce lo básico de historia y de geografía, se entiende mejor todo lo relacionado con la logística, por ejemplo. Entre varios, un caso interesante y valioso para conocer es la llamada Ruta de la Seda, la famosa ruta terrestre que vinculó a Roma con China comenzando hace unos 2.500 años.

Influyeron y fueron influidos por la Ruta, entre otros, Lao Tse (si es que existió), Confucio, Sócrates, Platón, Aristóteles, Alejandro Magno, Aníbal, Julio César, Augusto, Buda, Jesús y Mahoma.

Actualmente un contenedor que parta de China y viaje a Alemania por mar, demora unos 30-33 días, luego de viajar a puertos chinos, seguir por los océanos Pacífico e Índico, el Mar Rojo desde el Estrecho de Mandeb, el Canal de Suez, el Mediterráneo, y luego seguir por tierra hasta su destino.

Sin embargo, existe desde hace unos años una ruta terrestre, enteramente ferroviaria, algo más costosa, que demora sólo 13 días. Es la versión actual de la milenaria Ruta.

Se deben conocer los aspectos clave de la revolución neolítica y de la revolución industrial, y de los 2 últimos grandes eventos que pudieron significar nuestra extinción (el Dryas joven hace 12.900 años y la peste negra de los siglos XIII y XIV).

Lo mismo con los grandes progresos del pensamiento “reciente”, entre otros debidos a Al-Farabi, Avicena, Averroes, Maimónides, Copérnico, Descartes, Galileo, Pascal, Newton, Faraday y Maxwell, hasta llegar a Volta, la pila eléctrica, el telégrafo y la globalización iniciada en 1860, cuando el cable submarino de telégrafo permitió que una noticia trascendente se difunda de un continente a otro no ya en 1 semana sino en 10 minutos.

Debe tenerse una comprensión cabal de varios procesos políticos clave, entre ellos los de la Revolución gloriosa del siglo XVII, la Revolución Francesa, la independencia de los EE.UU., nuestro largo y complejo proceso de formación y consolidación de la unidad nacional, las historias de China, India, Rusia y lo que fueron las potencias navales europeas, la esclavitud, el tráfico de esclavos, el feudalismo y los cambios posteriores. Lo mismo con la evolución de la península ibérica, el Tratado de Tordesillas, la Guerra de los 7 años del siglo XVIII, las guerras de fin del siglo XIX, las Guerras Mundiales y la Guerra Fría.

La visión antropológica es imprescindible, se deben conocer los procesos evolutivos independientes en cada continente, las diferentes etnias y sus conflictos, la domesticación de animales, el sedentarismo, la agricultura, el riego, el arado, la trashumancia y los primeros impactos de estas actividades sobre el ambiente.

No son para nada inconvenientes los conocimientos de paleogeografía y paleoclimatología, la evolución de los continentes (Pangea, luego Gondwana y Laurasia, hasta la actual configuración), las 3 últimas eras (Paleozoica, Mesozoica y Cenozoica), el período actual (Cuaternario) y la época actual (Holoceno).

En todos los estudios de caso y disciplinas o ciencias, debe tenerse un conocimiento preciso acerca de quien es quien.

Al llegar a este punto conviene agregar conocimientos de derecho positivo, macroeconomía (una rama del saber de sólo 2 siglos) y de finanzas (de sólo medio siglo). Luego, saberes clave sobre ecología, ambiente, y generación primaria y secundaria de energía.

Respecto de economía, a modo de ejemplo, es esencial conocer la evolución del Producto bruto mundial a lo largo de los últimos 2.000 años hasta llegar a fenómenos actuales o recientes que requieren amplia comprensión, como nuestra crisis de los años 2001-2002, la crisis hipotecaria estadounidense de 2007-2008 y nuestra actual crisis respecto de la deuda pública. También es importante conocer acerca de las crisis económicas iniciadas en 1857 y 1873.

Las cualidades humanistas y de liderazgo permiten que alguien formado ampliamente no se convierta únicamente en un tecnócrata o en un burócrata de alto nivel. Deben cultivarse de manera permanente.

Al llegar aquí se puede empezar la formulación de políticas para el sector y el país, lo que será tema de una próxima columna de opinión.


Ing. Agr. Luis Villa
@LuisVilla2805