Las energías eólica y solar se utilizan
exclusivamente para generar electricidad (del mismo modo que la energía nuclear
y la hidráulica). Actualmente no hay
posibilidades de almacenar energía eléctrica; lo que se produce debe ser
consumido inmediatamente luego de generado y transmitido.
Todas las baterías del mundo pueden almacenar sólo 10 minutos de la energía
eléctrica producida actualmente.
La energía solar y la energía eólica
son intermitentes, y obligan a elevar la participación de centrales térmicas,
que actúan como respaldo para morigerar los desbalances en las líneas de
transmisión. Por eso el incremento de estas fuentes de energía no ha permitido ahorros de combustibles
fósiles, e incluso ha habido situaciones de incremento. La eficiencia
ha bajado (la eficiencia es mayor en la transmisión, cuanto mayor y más estable sea el
flujo de electrones).
De allí las reiteradas quejas de
Polonia y la República
Checa hacia Alemania, por el incremento de las pérdidas en la
transmisión debidas al parque eólico del norte alemán (es electricidad que
viaja a través de esos 2 países para llegar al sur germano). Véase:
Muy diferente será la situación cuando
se puedan almacenar importantes cantidades de energía eléctrica, aspecto sobre
el cual hay avances significativos, con las baterías
de metal líquido y otros dispositivos. También
habría capacidad de almacenar
electricidad si el parque de autos
eléctricos alcanzare los 180-200 millones de unidades (tal vez en 2045).
Muchos de estos autos se cargarían de noche y se descargarían de día,
entregando electricidad a la red durante los picos de consumo.
Ing. Agr. Luis Villa
@LuisVilla2805
No hay comentarios.:
Publicar un comentario